El desliz nuclear de Olmert
Interesante análisis de Juan M. Muñoz, aparecido en El País de hoy, tras la publicación de una entrevista concecida por el Primer Ministro Israelí a Der Spiegel.
¿Ha quebrado el primer ministro israelí, Ehud Olmert, la política de ambigüedad que ha mantenido el Estado de Israel desde hace medio siglo en torno a su armamento nuclear? Políticos y analistas debatían ayer acaloradamente, como suele ser habitual en este país, las palabras del jefe del Ejecutivo, que vienen a decir que el Estado judío no puede ser comparado con Irán, "cuando el régimen de Teherán desea acceder al armamento nuclear como Estados Unidos, Francia, Israel y Rusia". "Ha sido una interpretación errónea sacada de contexto", se apresuraron a advertir los portavoces de la Oficina del Primer Ministro y del Ministerio de Asuntos Exteriores. Pero entre la clase política se ha desatado una tormenta política de primera magnitud. No en vano, se está poniendo en tela de juicio uno de los principios fundamentales de la doctrina de seguridad del Estado sionista.
"La declaración de Olmert bordea la irresponsabilidad", afirma Yossi Beilin
Desde la derecha y la izquierda llovieron ácidas críticas sobre el jefe del Gobierno. Yuval Steinitz, diputado del Likud, exigió su dimisión. "Su desafortunada declaración daña la política de ambigüedad, y ello se añade a otros lapsus como el desafortunado anuncio sobre el destino de los soldados capturados en Líbano", afirmó Steinitz. Yossi Beilin, parlamentario de Meretz, tampoco se anduvo por las ramas: "La asombrosa declaración del primer ministro indica una falta de cautela que bordea la irresponsabilidad y suscita dudas sobre si es la persona adecuada para ejercer como jefe del Gobierno".
A simple vista podría parecer que el asunto no debería tener mayor trascendencia, porque no hay país en el mundo -especialmente los Estados árabes y musulmanes- que ignore que Israel dispone de cabezas nucleares desde hace décadas. Pero el asunto es de la máxima relevancia para un país que no ha suscrito el Tratado de No Proliferación nuclear (TNP) y que podría ver afectadas, aunque siempre en escasa medida, sus relaciones bilaterales con su eterno aliado: Estados Unidos.
La política de ambigüedad seguida por Israel desde finales de los años 50 pretende asegurarse tres objetivos: en primer lugar, no colocar a Washington en una situación embarazosa, dado que no se conoce la contribución de la primera potencia mundial al programa nuclear de su socio en Oriente Próximo, aunque fuera Francia quien iniciara la ayuda a Israel cuando este país daba sus primeros pasos en materia atómica. En segundo término, el Estado judío siempre ha temido que el anuncio explícito de la posesión de un arsenal atómico podría disparar una carrera nuclear entre los países árabes de Oriente Próximo. Algo que en alguna medida está sucediendo ahora que Irán se haya embarcado en el desarrollo de su propio programa. Varios países del Golfo Pérsico, temerosos como nadie de un Irán con capacidad atómica, ya han anunciado su intención de desarrollar planes similares, aunque insistan en que su finalidad fuera sólo la generación de energía. Por último, si Israel admitiera su potencial, podría ser incluido en la lista de naciones a las que se prohibiría la exportación de determinadas materias primas.
Los Gobiernos hebreos han gastado grandes sumas de dinero para impedir filtraciones; mantuvieron en prisión durante casi dos décadas a Mordejai Vanunu, el ingeniero que desveló la posesión del arma nuclear, e incluso existe un cargo ad hoc en la Administración para aplicar esa política de no decir ni sí ni no.
¿Es una coincidencia que Olmert, poco antes de aterrizar anteanoche en Alemania, citara a Israel junto a países que disponen de bombas atómicas? ¿Es casualidad que el nuevo secretario de Defensa de Estados Unidos, Robert Gates, asegurara en una comparecencia ante el Senado que Israel es un Estado nuclear? El tiempo lo dirá. Pero lo que es evidente es que el Gobierno de Tel Aviv, empezando por su jefe, ha endurecido sobremanera sus amenazas hacia Irán. Olmert señaló días atrás que no descarta ninguna medida para impedir que el régimen islámico persa se haga con la bomba nuclear y en los foros políticos en los que intervienen dirigentes o periodistas extranjeros apenas se habla de otro asunto.
Persisten las dudas sobre si la confusa entrevista del primer ministro representa el punto final a una senda seguida desde los primeros años de la fundación del Estado judío. No obstante, la mayoría de los expertos se inclinan por pensar que la estrategia de la ambigüedad continuará. "Mientras Estados Unidos no exija a Israel el sometimiento a la supervisión internacional, como demanda a Irán y Corea del Norte, no habrá cambios", escribía ayer en el diario Yediot Ajoronot el analista Ronen Bergman.
21 comentarios
alejandro estrada -
Emma Bernardo -
Anónimo -
Rubén -
Azahara Morales -
Ignacio -
Bueno... era un secreto a voces. Si tiene consecuencias positivas, estilo que Olmert se vaya o que no haya bombas atómicas por aprte de Israel... Mejor.
Que pasa con Irán ¿No pueden tenr energía nuclear y un estado masacra-palestinos si?
beatriz saez -
Patricia Perez Camara -
Sopla levante, Virginia -
Pablo J -
Menos fondos en armamento y más dinero en igualdad de oportunidades!!!
Elia Pesquera -
Rodrigo -
Sonia Sanz -
Pluma y esmero
las armas que usaré.
Los golpes del tintero,
los únicos que daré.
Pedirlo es lo que debo,
y sentirlo es lo que siento.
Discúlpeme de entrada
por tardar en responder,
las bombas cayeron
y todo empezó a arder.
Contarle mi desvelo y explicarle que no entiendo.
Si usted sabe del por qué ya no hay agua,
que el maestro ya no viene a clase.
Que mi amigo ya no tiene padre,
si usted sabe lo que sabe.
Por qué no dejas ya de callar,
las voces que no quieren tu plan,
por qué no entiendes que un día más
será otro día pero hacia atrás.
Por qué no me devuelves el sol,
la casa, mi familia y carbón.
Si es mucho lo que pido, perdón,
no olvide lo que es mío, señor.
Aquí mi compañero le quiere preguntar
si todos los soldados que dice que vendrán
harán lo que ya hicieron lo que ahora ya no están.
Si usted sabe que no queda nada, que el recuerdo
se mantiene oscuro.
Que mi madre solo lleva luto,
si usted sabe loq ue sabe.
Por qué no dejas ya de callar,
las voces que no quieren tu plan,
por qué no entiendes que un día más
será otro día pero hacia atrás.
Por qué no me devuelves el sol,
la casa, mi familia y carbón.
Si es mucho lo que pido, perdón,
no olvide lo que es mío, señor.
"África y sus barcos, llenos de letras que caen al mar,
los pescadores de Thyarolle
ya no llevan pesacado,
embarcan a los jóvenes
cuyas madres animan a marchar
creyendo que el otro lado del mar
es la tierra prometida.
Las compañías a cambio de dinero
se frotan las manos,
aunque solo sea por unas migajas
los gobiernos bajan los brazos, el mundo se limita a constatar".
Jorge Inarejos -
Sonia Sanz -
Alberto Luque -
Israel hace como Estados Unidos con la democracia, ellos sí, yo no; aunque en este caso ellos no, yo sí. No estoy de acuerdo en casi nada con Irán y no estoy de acuerdo con el armamento nuclear pero si la tiene Israel, la India, Putin o Pakistán, ¿por qué no ellos?. ¿Acaso Pakistán no es un país musulmán?
Anónimo -
Noelia (Roja) -
Larry -
Teresa Villar -
Pablinator -