Recordemos los problemas creados por la Ley Seca en EEUU
Fueron catatróficos: aumento del alcoholismo, cirrosis hepáticas, envenamientos por adulteraciones, implosión de las mafias y del crimen organizado, enriquecimientos de escándalo. Ahora, con el talante que preside la Ley del Tabaco uno se pregunta qué angustias y fobias padece el legislador y el gobierno con esa especie de saña persecutoria y esa retahíla de multas enloquecidas. ¿Quién se ha beneficiado durante más de un siglo con el monopolio de tabacos? ¿Quiénes promovieron la cultura del tabaco como un paradigma del machismo y de la modernidad para las mujeres? Queda reconocido el derecho de los que no fuman a que nadie les moleste, por supuesto. Pero ¿era necesaria esta paranoia que culpabiliza al honesto ciudadano que se quiere meter en su cuerpo soberano un peta o una caja de puros con envoltura y todo? ¿De qué van estos conversos? Están enloquecidos. ¿Para cuando la persecución de los estragos del alcoholismo, del envenenamiento del medio ambiente que afecta a todos, hasta a los más inocentes? Ah, pero el negocio del alcohol en nuestro país así como la compulsión obsesiva para que todos compremos coches, así como ¡¡¡la infamia por la que se permite a Fórmula 1 la publicidad de los tabacos duranet tres años!!! eso parece harina de otro costal. Dan ganas de mandar parar el planeta y bajarse. Lean esta nota sobre la contaminación en nuestra querida ciudad y la disposición de los gobernantes. Fue muy ilsutradora la entrevista del otro día a la Ministra del Medio Ambiente. Que luego no digan que no lo sabían, como siempre. Nesemu La contaminación en Madrid tiene su principal origen en la combustión de carburantes fósiles generada por el tráfico rodado. Según la Comisión Europea, cada año se producen 370.000 muertes prematuras en los países de la UE, así como 114.000 ingresos hospitalarios.
En Madrid, según los estudios de IU, una reducción de cinco microgramos por metro cúbico en los valores medios de partículas en suspensión podría prevenir 526 muertes anuales.
El Ayuntamiento ha apostado sólo por cierres parciales al tráfico en la Casa de Campo y en la Dehesa de la Villa, por peatonalizar algunas calles e incrementar las zonas de aparcamiento restringido. Gallardón sólo habló de limitaciones cuando la candidatura olímpica se comprometió a fomentar el uso del transporte público y reducir el tráfico el 10% antes de 2012.
Permítanme que añada el ultimo párafo del editorial de El País sobre el tema:
Los motivos son, pues, loables y las medidas previstas son sensatas, aunque no de forma general. La ley, por ejemplo, va más allá de lo exigible cuando prohíbe taxativamente la existencia de locales para fumadores en los centros de trabajo, prohibición que no se explica por las razones antes apuntadas, sino que quizá tenga que ver con algunos de los argumentos avanzados durante la tramitación parlamentaria. En efecto, se llegó a afirmar por sus defensores en el curso de los debates, que dicha prohibición estaba dictada no sólo por la necesidad de proteger a los no fumadores de los fumadores, sino también a éstos de sí mismos. Puntos de vista de este cariz no parecen compatibles con la autonomía personal inherente a las personas adultas en una sociedad regida por principios liberales, y no debería nunca aducirse ni servir de motivación para regular los asuntos públicos. Sobre la conveniencia general de una normativa como la que nos ocupa, parece necesario proceder con sentido común y respeto a las libres decisiones de los individuos, siempre que no perjudiquen a los demás.
17 comentarios
MARIO -
Anónimo -
isa -
Lucía Martín -
El gobierno se ha servido de los impuestos tabaqueros para financiar entre otras cosas la Sanidad Pública (¡qué paradoja!).
Respeto el derecho a locales sin humos y no desprecio la ley, pero esta medida va acompañada de muchas contariedades, como por ejemplo el desempleo de trabajadores que vendían tabaco en lugares en los que hoy califica la ley de no aptos y sin embargo la gran industria tabaquera se vea mínimamente afectada.
El gobierno debe tener en cuenta las necesidades de los estanqueros y empleados en este sector que durante décadas han vivido honradamente y ahora se ven abandonados.
Lucía Martín -
El gobierno se ha servido de los impuestos tabaqueros para financiar entre otras cosas la sanidad pública (¡qué paradoja!).
Respeto el derecho a locales sin humos y no desprecio la ley, pero esta medida va acompañada de muchas contariedades, como por ejemplo el desempleo de trabajadores que vendían tabaco en lugares en los que hoy califica la ley de no aptos y sin embargo la gran industria tabaquera se vea mínimamente afectada.
El gobierno debe tener en cuenta las necesidades de los estanqueros y empleados en este sector que durante décadas han vivido honradamente y ahora se ven abandonados.
Zola -
Otro gobierno del lado de las multinacionales. Otra ley para engañar y orientar a la opinión pública hacia sus intereses. En lugar de ir contra las tabacaleras que contaminan cada cigarrillo con amoníacos, pegamentos,etc...se ataca la libertad del fumador para "preservar su salud". ¿Por qué está prohibido que yo tenga una planta de tabaco en mi casa que me proporcione la cantidad suficiente para fumar durante un año sin que nadie se enriquezca a mi costa?Encima sería un tabaco no adictivo, natural y que implicaría un cambio radical en la cultura del tabaco. Pero no, si voy a un "grow-shop" podré encontrar muchas clases de marihuana diferentes, pero nunca una semilla de tabaco porque está prohibido cultivarla(aunque no consumirla). Un caso más en el que las tabacaleras salen beneficiadas y los fumadores perjudicados. No hacía una falta una ley para preservar la salud de los que no fuman, para eso sólo se necesita un poco de educación.
J.Lennon -
Jarkoe -
Muñoz -
Sergei -
Por un lado, no prohíbe la venta, ni penaliza a las industrias tabacaleras, ni suprime los impuestos ni nada parecido. Es decir, permite que se sigan creando adictos al tabaco.
Y, por otro lado, penaliza que se pueda consumir tabaco en lugares públicos, en ¡¡bares¡¡ o en los andenes del Metro.
Eso sí, en los psiquiátricos puede fumar quien quiera.
Es un despropósito se mire por donde se mire.
Siempre he pensado que el fumador debería ser cuidadoso y educado, tener en cuenta las circunstancias. Y el no fumador lo mismo.
Pero claro, las leyes salen más baratas que la educación. Mucho más.
Media Verónika -
Belén -
Por otro lado, como dice Marcos, el tema de la contaminación es muy complejo, porque es muy difícil conseguir que la población en general abandone ciertas comodidades como el uso excesivo de los coches. Aún así, considero que es una prioridad concienciar a la gente sobre este problema y reducir la contaminación o, incluso, acabar con ella.
Escila -
Sara Ortegón -
Marcos -
Con respecto a la ley del tabaco, yo seré uno de los beneficiados ya que no me gusta, pero sin embargo veo que el extremismo que se está alcanzando es absurdo. Lo de proteger a los fumadores de ellos mismos es ridículo: se supone que estamos en una sociedad cuya base fundamental es la libertad del individuo y ahora resulta que ese individuo no puede hacer lo que quiera con lo que es esencialmente suyo.
Ángeles -
Ángeles -