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J. C. García Fajardo

El Minitro de Justicia de mantiene firme ante el ultimatum de los obispos

Esta tarde coincidi en una recepción con el ministro de Justicia, Bermejo. Le animé en su lucha contra la intolerancia y el fundamentalismo ideológico. Sé que a algunso bloggers les sorprenderá pero tengo mis razones para sostener cualquier movimiento serio e Iustrado contra este fundamentalismo ideológico y anacrónico como el que representan esta caterva de obispos peligrosos para una convivencia racional, moderna y democrática. Mientras hablábamos sosteníamos nuestras manos entrelazadas. Dicho queda y alerta estamos. No podemos bajar la guardia ante esta turba de desequilibrados.
El Ministro de justicia afirma que quien no cumpla la ley "se atendrá a las consecuencias" 
 
La campaña de los obispos contra la asignatura Educación para la Ciudadanía ha recibido el respaldo del Vaticano por boca del secretario de la poderosa Congregación para la Doctrina de la Fe (ex Santo Oficio de la Inquisición), el arzobispo italiano Angelo Amato, de visita en Madrid. Pero el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, enfrió ayer las alegrías episcopales advirtiendo de que no sigan "incitando" a la objeción de conciencia ante esa asignatura porque el Estado de derecho actuará. Quien no cumpla la ley "tendrá que atenerse a las consecuencias", proclamó.
Los obispos españoles reciben el apoyo directo del Vaticano en su campaña contra la asignatura de Ciudadanía por boca del secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Angelo Amato. El arzobispo italiano, que fue segundo también del cardenal Joseph Ratzinger cuando el hoy papa Benedicto XVI presidía el citado dicasterio.
El alma organizativa del órgano sucesor de la antigua Sagrada Congregación de la Romana y Universal Inquisición declaró en Aranjuez, según el comunicado oficial de su intervención: "El cristianismo reconoce la libertad de seguir las propias convicciones religiosas y no debe ser el Estado quien debe imponer las convicciones religiosas y éticas, sino la propia conciencia". ¿Dónde estaba esa conciencia durante los 40 años de dictadura y férrea imposición del pensamiento único nacionalcatólico?
El secretario de la conferencia Episcopal, el jesuita Juan Antonio Martínez Camino, un hombre paranoico y desequilibradio ex monje trapense y ex todo, criticó el empeño del Gobierno por "imponer" esa asignatura porque, dijo, vulnera "los derechos humanos". La polémica suscitada no es un conflicto Iglesia-Estado "sino un problema de toda la sociedad", añadió. Los obispos siguen proponiendo a sus fieles que ejerzan el derecho a la objeción de conciencia contra la asignatura.
El Gobierno confía en que la "cordura prevalezca" entre la jerarquía católica y que "todo el mundo cumpla la ley".
Estas son las declaraciones del ministro,que me ratificó cudrante nuestra cinversación: "Si nos atenemos a lo que piensa la Federación de Religiosos de la Enseñanza, no creo que vaya a haber ningún aluvión de gente en esa dirección [planteando objección de conciencia]. Si eso llegara a producirse sería una minoría. En todo caso, me preocupa que desde la autoridad religiosa se siga incitando en esa dirección. En un Estado de derecho todo el mundo está obligado por la ley, también los credos religiosos. El Gobierno espera que la cordura prevalezca, que todo el mundo cumpla la ley. El que no la cumpla, tendrá que atenerse a las consecuencias".
Los obispos están enviando mensajes que no se corresponden ni con la realidad de la asignatura ni mucho menos con la actitud que debe tener la jerarquía religiosa de cualquier credo en un Estado de derecho, que debe respetar la ley como el primero y que debiera dar ejemplo de respeto a esa ley".
Las palabras del ministro, y antes las del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, advirtiendo el domingo pasado que el Ejecutivo socialista no rectificará su decisión de que se imparta esta asignatura en toda la red escolar pública y concertada, no parecen hacer mella en el episcopado. Ayer mismo lo reiteró su principal portavoz en esta campaña, el cardenal primado de Toledo y vicepresidente de la Conferencia Episcopal, Antonio Cañizares.
Los obispos piensan que el único semillero del catolicismo es la escuela, toda la escuela española. Es el terreno en el que la Iglesia romana mantuvo durante más tiempo un control absoluto, que el Estado español cedió de buen grado durante siglos (en el XX, a lo largo de los 40 años de la dictadura del general Franco). Aún sueñan con empezar desde las aulas la "recristianización" de España, "viña devastada" por laicistas radicales según dicen con convencimiento.
En las pocas épocas pasadas de liberalismo y libertad, el principal motivo de conflicto entre el gobierno de turno y los eclesiásticos fue la educación. También ocurrió durante los Ejecutivos del socialista Felipe González. Su reforma educativa, mediante la LODE, sacó a los obispos a la calle, en manifestación contra las rígidas condiciones impuestas a los generosos conciertos educativos, y contra el amparo a la libertad de cátedra.
En esas ocasiones, el episcopado y sus poderosas organizaciones de padres católicos jamás apelaron al incumplimiento de la ley. Ahora lo hacen sin tapujos, en defensa de un indeterminado derecho a la objeción de conciencia.
El ministro de Justicia, que coordina las relaciones Estado-Iglesia romana mediante una llamada Dirección General de Asuntos Religiosos, confía en que fracasen las pretensiones de los prelados. Su advertencia de ayer fue tajante, aunque no la primera que hace el Gobierno. No cabe tal objeción de conciencia, de manera que quienes no ofrezcan clases con la asignatura de Ciudadanía en sus colegios, y el chico que no la curse, deben "atenerse a las consecuencias".
El Ejecutivo no espera, con razón, aluviones de objetores, poniendo por testigo la actitud de Federación de Religiosos de la Enseñanza, muy mayoritaria en el sector. La FERE no piensa secundar los deseos episcopales, sino negociar con la Administración libros, textos o lecturas que liberen a los centros de enseñar nada contra sus idearios.
¿Cómo piensan articular, entonces, los obispos, la tan cacareada objeción de conciencia? No lo han dicho, probablemente porque no tienen idea. Sólo insisten en su derecho a hacerlo, con el argumento de que la polémica asignatura atenta contra fundamentales "derechos humanos".
Es lógico que el Gobierno socialista se reserve la respuesta legal que piensa dar a esta rebeldía episcopal, si se produce. Pero la legislación es clara, y pesa como losa sobre los colegios concertados. Cuando firman recibir dinero del Estado para su funcionamiento, asumen el compromiso de cumplir condiciones tasadas con claridad. Si incumplen, pierden el concierto.
En mi opinión la actitud de los obispos ultramontanso en España es más peligrosa que las criminales actuaciones de los terroristas, islamistas o de ETA, porque se dirigen a las conciencias.  Y más peligrosas que la errática política de ese exalcohólico y hombre sin criterios, Bush, porque este pasará pero la ideología tridentina permanecerá porque en ello le va su razón de ser, tan alejada del pensamiento y de la vida del hombre de Nazaret.

6 comentarios

Media Verónika -

Yo también estoy con Rubén, me parece increíble que se atrevan a exigir y se entrometan hasta este punto cuando se supone que vivimos en un Estado laico que aún encima les concwede privilegios que ni debían tener. Otra cosa que me pregunto y no acabo de entender es de qué manera vulnera esta asignatura los derechos humanos, y si en breves se acordarán de que se sigue impartiendo las teorías de la evolución en biología, que supongo que también atenta contra todo lo establecido...

pau -

Hacer cumplir la ley a rajatabla, como se debería persiguir a los empresarios chinos que hacen trabajar a menores de edad.
Pero tampoco es necesario ir demasiado lejos, se les insinua que deberán pagar impuestos como todo hijo de vecino, y seguro que encuentran la ley acorde con el catolicismo.

Nesemu -

Estoy contigo Rubén, pero qué bueno es este mundo de los blogs que se pueden expresar libremente Raul, Iván y quienes con todo derecho piensen como ellos. Al menos, nos leemos unos a otros, que no es poco. Y en cuanto a comparar a los obispos con ETA es una simpleza yuna arbitrariedad del blogger. Pero allá el. Yo/nosotros seguimos. Ah me permito aconsejar mi blog diario en el idem "maldito" lacomunidad.elpais.com/jubilateria

Raúl -

Totalmente de acuerdo Iván, ¿pero no te han informado? , pp=hombres del saco , derechona, iglesia=ladrones fascistas y la cope mala.Además si lo dice Bermejinski,cuya cita más famosa antes de su cargo fue:soy de izquierdas y como tal actuaré,pues muy bien, ole ese justiciero!!.

Iván -

Muy buenas.
Comparar a los obispos con ETA resume muy bien la intención de este blog y su búsqueda de la objetividad.
"La mayoría de los ciudadanos", y se queda tan pancho. Quiero aclarar que para dar una opinión no valen coaliciones con IU y similares, esta es personal. Luego habrá que reconsiderar eso de la "mayoría".
Nos vemos.

Rubén -

Espero que el Gobierno aprovechando esta nueva bravuconada de la Conferencia Episcopal , le de motivos para quejarse de verdad anulando cualquier concordato con el Vaticano y suprimiendo la nueva ley de financiación de la iglesia . Que lejos de recortar sus privilegios se los aumenta.
Lo dicho , espero que de una vez por todas el Gobierno haga lo que pedimos la mayoría de los ciudadanos , suprimir la financiación de la iglesia y hacer de España un auténtico país laico y aconfesional.