Es importante seguir el tema de la explotación de los niños
Bajo el título de 'Las llagas de la infancia', En portada desvelará en cuatro reportajes las lacras que asuelan a los niños en el mundo, "el segmento de población más desfavorecido y marginado", según su director, Juan Antonio Sacaluga. Mozambique, Sierra Leona, Brasil y Perú son los escenarios elegidos por el equipo del programa de actualidad de La 2. 'El largo camino hacia la escuela' inaugura hoy (22.30) los especiales.
Los niños son el eslabón más frágil de la cadena. "Los más desfavorecidos entre los desfavorecidos", subraya Juan Antonio Sacaluga, hasta el punto de que "en casos extremos se vuelven invisibles", dice. Para denunciar el abuso y el atropello a los menores, En portada ha preparado cuatro reportajes. 'El largo camino hacia la escuela' abre los especiales, que abordan los problemas de la infancia en los países del Tercer Mundo o en vías de desarrollo.
Según la ONU, más de 120 millones de niños no tienen acceso a la educación primaria. Mozambique es uno de los países donde la educación es un reto, como sucede en otras zonas de África, Asia y América. "El 86% de los niños está escolarizado, pero llegar a las aulas no es fácil", declara Yolanda Sobero, autora del guión. A las largas caminatas se añade la falta de maestros, y sobre todo de maestros mejor formados. "El método de enseñanza es rudimentario, no hay cuadernos, ni lápices... pero lo peor es la malnutrición y las enfermedades como la malaria y el sida", explica.
'Sierra Leona: marcados por la guerra' se acerca a la utilización de los niños "como carne de cañón", en palabras de su autora, Llúcia Oliva, y muestra los daños que provoca su paso como mercenarios por movimientos armados. Asimismo cuenta con los espeluznantes testimonios de jóvenes guerrilleros.
"Después del conflicto, unos pocos tienen la oportunidad de integrarse tras un proceso de rehabilitación", dice Oliva. Sin embargo, la recuperación de las niñas es muy difícil. "Además de empuñar las armas son obligadas a satisfacer sexualmente a los jefes. El secuestro, la violación y el nacimiento de hijos provoca daños irreversibles en el ecosistema humano, al que se suma el repudio de sus familias", apunta Sacaluga.
Los abusos sexuales de menores ocupa el tercer especial, firmado por Isabel Martínez Reverte. En portada ha elegido Brasil para contar esta llaga, "pero la situación podía extrapolarse a otros países como los de Extremo Oriente", según Sacaluga. A pesar de los enormes esfuerzos del Gobierno de Lula por erradicar esta lacra, los intereses son tan poderosos que la herida está lejos de cicatrizar.
Cerca de 250 millones de niños trabajan en el mundo. En América Latina, más de 20 millones son explotados. Un equipo ha viajado hasta Perú para conocer de primera mano las dramáticas condiciones de trabajo en las minas de oro o picando piedras. "Hemos rodado escenas terribles", explica Andrés Luque, guionista y realizador de la última producción de En portada. Una de las que más le ha impactado filmar es la disputa entre una piara de cerdos y un grupo de niños en un basurero.
Los niños son el eslabón más frágil de la cadena. "Los más desfavorecidos entre los desfavorecidos", subraya Juan Antonio Sacaluga, hasta el punto de que "en casos extremos se vuelven invisibles", dice. Para denunciar el abuso y el atropello a los menores, En portada ha preparado cuatro reportajes. 'El largo camino hacia la escuela' abre los especiales, que abordan los problemas de la infancia en los países del Tercer Mundo o en vías de desarrollo.
Según la ONU, más de 120 millones de niños no tienen acceso a la educación primaria. Mozambique es uno de los países donde la educación es un reto, como sucede en otras zonas de África, Asia y América. "El 86% de los niños está escolarizado, pero llegar a las aulas no es fácil", declara Yolanda Sobero, autora del guión. A las largas caminatas se añade la falta de maestros, y sobre todo de maestros mejor formados. "El método de enseñanza es rudimentario, no hay cuadernos, ni lápices... pero lo peor es la malnutrición y las enfermedades como la malaria y el sida", explica.
'Sierra Leona: marcados por la guerra' se acerca a la utilización de los niños "como carne de cañón", en palabras de su autora, Llúcia Oliva, y muestra los daños que provoca su paso como mercenarios por movimientos armados. Asimismo cuenta con los espeluznantes testimonios de jóvenes guerrilleros.
"Después del conflicto, unos pocos tienen la oportunidad de integrarse tras un proceso de rehabilitación", dice Oliva. Sin embargo, la recuperación de las niñas es muy difícil. "Además de empuñar las armas son obligadas a satisfacer sexualmente a los jefes. El secuestro, la violación y el nacimiento de hijos provoca daños irreversibles en el ecosistema humano, al que se suma el repudio de sus familias", apunta Sacaluga.
Los abusos sexuales de menores ocupa el tercer especial, firmado por Isabel Martínez Reverte. En portada ha elegido Brasil para contar esta llaga, "pero la situación podía extrapolarse a otros países como los de Extremo Oriente", según Sacaluga. A pesar de los enormes esfuerzos del Gobierno de Lula por erradicar esta lacra, los intereses son tan poderosos que la herida está lejos de cicatrizar.
Cerca de 250 millones de niños trabajan en el mundo. En América Latina, más de 20 millones son explotados. Un equipo ha viajado hasta Perú para conocer de primera mano las dramáticas condiciones de trabajo en las minas de oro o picando piedras. "Hemos rodado escenas terribles", explica Andrés Luque, guionista y realizador de la última producción de En portada. Una de las que más le ha impactado filmar es la disputa entre una piara de cerdos y un grupo de niños en un basurero.
13 comentarios
lAuRaaaaaaa -
Gema -
Son los países ricos los que deben hacer que esta situación cambie. Menos deuda externa y más miradas hacia esos niños.
Esos niños no recibirán educación pero tampoco la recibieron en su día sus explotadores y abusadores. Por favor, con un niño. Es aberrante.
Y luego imponen castigos por mucho menos.
SEVILLANO -
Si a los desastres naturales que en ocasiones nosotros mismos provocamos, le sumamos el hambre y la despreocupación por los niños nos encontramos con un futuro sin una base en la que apoyarse. Los niños de hoy, serán los padres del mañana, de esta forma la situación se convertirá en un circulo vicioso y será muy difícil encontrar un fin.
Estrada -
\"Qué piensas si te digo, si te cuento que no saben el por qué. Son ángeles que luchan, que se entrenan al momento de nacer.
Sus juegos son batallas, sus deseos van en busca de la paz. No cruzan las fronteras, se atrincheran, desertores de la edad.
A quién creer, ven a mí. A quién rezar, ven aquí.
Soldados sin galones, sin desfiles ni uniformes que vestir. Soldados portadores, defensores de las ganas de vivir.
A quién creer, ven a mí. A quién rezar, rezar y ser feliz.
Sus sueños quedan rotos por caciques que no saben que es llorar, no lo dudes, me revelo contra esta cruel pasiva sociedad.
A quién creer, ven a mí. A quién rezar para ser feliz.
Son los niños de la guerra, son los niños de la paz. Su futuro esta en las armas y morirán.
Dime si después sus deseos son ejemplo para todos los demás, y defienden sus ideas de libertad, de libertad.\"
Toda persona merece una educación y que le respeten su libertad, sobretodo si son niños. Se aprovechan de su pobreza e inocencia para sus propios intereses y no se dan cuenta que están acabando con sus vidas y las de las generaciones siguientes.
Los países desarrollados deberían abrir los ojos y empezar a hacer algo por esos niños.
Sonia Sanz -
Más tarde es el turno de sus hijos, que viven tan sumidos en la pobreza y el hambre que se ven obligados a hacer lo que en su día tuvieron que hacer sus padres...
Ahí es donde tienen que entrar los países ricos, esos que no hacen otra cosa que pedir el pago de una deuda que sin formación, sin progreso, es imposible de pagar. Ya que están pidiendo algo injusto que se molesten en hacer justicia.
La educación es un derecho, no un privilegio. La infancia también es un derecho, es injusto privar de ella a los más pobres.
Cristina -
Agotamiento para vivir y trabajar, analfabetismo, enfermedades y malnutrición, envejecimiento precoz. Es el momento de romper esta espiral, que muchos se obstinan en considerar como una inevitable \'fase de crecimiento de las sociedades en vías de desarrollo\'. Pero no solo se da la explotación laboral en los niños, también la sexual, y esta incluso en \"países desarrollados\" De un tiempo a esta parte, los casos de abusos , de prostitución y de pornografía infantil han aparecido constantemente en los medios de comunicación. ¿Es que antes no existía esta explotación?. Siempre se ha abusado de la infancia, pero probablemente nunca se había llegado a un nivel de comercialización tan feroz y global como el de hoy en día.
Debemos luchar contra estas enormes injusticia que violan los derechos de los niñosLa ilusión puede cambiar el mundo.
Javier Ibáñez -
Si estas noticias llevaran a cabo una reacción social se podría hacer mucho con un poco de cada uno, pero claro, es más fácil manifestarse por tonterías.
Frías -
Jarkoe -
Toribio M.A. -
Andrés (Mirando al sur) -
\"Niños que perdí, a los que mentí, gritan a lo lejos, arañan el hielo de la luz de la mañana. Niños con espinas, con cuencas vacías, que te lanzan piedras, tiñen las sirenas de todas las ambulancias\"
Ismael Serrano- \"Si Peter Pan viniera\"
Belén -
Son manipulados y obligados a formar parte de guerrillas, que en vez de enseñarles cosas útiles y necesarias les convierten en máquinas de matar a edades muy tempranas. Mientras que en España, los niños juegan en los parques o ven los lunis, en países como Sierra Leona les ponen un fusil en las manos, por que comida no habrá, pero armas si.
El tema de los abusos sexuales a menores es simplemente asqueroso, vomitivo. Los pederastas deben ser perseguidos de forma brutal, al igual que las mafias que trafican con niños y los ponen a disposición de esos desgraciados.
A millones de niños en todo el mundo no sólo se les ha robado la infancia, se les ha condenado de por vida y se les ha privado de valores.
No sólo se les ha herido profundamente a base de abusos o malos tratos, se les ha hecho sentir a muchos que simplemente son cosas, no personas.
Los derechos de los niños (y de las personas, en general) son sagrados, no se puede permitir que esta explotación siga adelante. Nada vale más que la vida de una persona, aunque por desgracia muchos no piensen lo mismo.
Alejandra Requena -
Por lo demás, ni que decir tiene que la explotación de los niños y su utilización como soldados de guerra me parece una barabaridad que tendría que acabarse ya, porque todos los niños tienen derecho a disfrutar de su infancia.