Nesemu: Derechos inviolables de los prisioneros
Suscribo las palabras del gran periodista y amigo Luis Ignacio Parada en su artículo en ABC en defensa de los derechos que a todo detenido le reconocen las Convenciones de Ginebra y de la Haya. Ni al criminal más convicto y confeso le pueden ser negados estos derechos a la intimidad y al honor, más aún si todavía no ha sido juzgado. Las fotografías que ha publicado ignominiosamente The Sun, del sátrapa Murdoch así como las vergonzosas declaraciones de Bush nos hacen ver por dónde van las actuaciones de los soldados del ejército de una potencia democrática en el trato con los prisioneros dde guerra. Cualquiera que haya visto esas fotos se imagina las que han podido obtener de esa persona en momentos de desesperación, de abatimiento o situaciones más íntimas. Produce vergüenza y rubor ese desprecio institucionalizado. Sobre todo para un público musulmán cuya cultura le da una muy aguda sensibilidad sobre los desnudos. Así no se construyen puentes ni se siembra democracia, se dinamitan. (El título, no obstante, parece haber sido puesto por el redactor que no comulga con las nobles ideas del autor. No tiene nada que ver con el texto y sí bastante con línea editoial de ese periódico. Una pena.)
Nesemu
Un dictador pierde mucho en calzoncillos
LA Tercera Convención de Ginebra señala que «los prisioneros de guerra deberán ser tratados humanamente en todas las circunstancias». Añade que «deberán ser protegidos en todo tiempo, especialmente contra todo acto de violencia o de intimidación, contra los insultos y la curiosidad pública». Establece igualmente que «tienen derecho, en todas las circunstancias, al respeto de su persona y de su honor» y «conservarán su plena capacidad civil tal como era cuando fueron capturados». El Cuarto Convenio de La Haya dice que «en todas las circunstancias, su persona, su honor, sus derechos familiares, sus convicciones y prácticas religiosas, sus hábitos y sus costumbres deben ser respetados, sin distinción alguna desfavorable por razones de raza, religión u opiniones políticas/.
La custodia legal de Sadam Husein está a cargo del Gobierno iraquí. Pero su encarcelamiento físico es todavía responsabilidad de las fuerzas de seguridad estadounidenses. Cuando fue detenido, en diciembre de 2003, Donald Rumsfeld explicó que «el ex dictador está en un lugar secreto donde es interrogado en calidad de prisionero de guerra conforme a la convención de Ginebra». Nada más lejos de la realidad. Porque un diario sensacionalista británico ha publicado fotos del ex dictador en calzoncillos y lavando su ropa. El Ejército estadounidense anunció ayer que ha abierto una investigación para descubrir quién filtró las imágenes. Lo que es tanto como aceptar que alguien con responsabilidad consintió que se hicieran. A menos que sean un montaje o correspondan a un doble de Husein no sólo no se ha reparado el trato inhumano a que fue sometido en la revisión capilar y dental tras su detención, sino que se han violado de nuevo todos los acuerdos internacionales sobre los prisioneros de guerra. Por mucho que Husein vaya a ser sometido a juicio por genocidio y crímenes de guerra, la utilización de su imagen para minar la resistencia iraquí es un acto reprobable.//
Nesemu
Un dictador pierde mucho en calzoncillos
LA Tercera Convención de Ginebra señala que «los prisioneros de guerra deberán ser tratados humanamente en todas las circunstancias». Añade que «deberán ser protegidos en todo tiempo, especialmente contra todo acto de violencia o de intimidación, contra los insultos y la curiosidad pública». Establece igualmente que «tienen derecho, en todas las circunstancias, al respeto de su persona y de su honor» y «conservarán su plena capacidad civil tal como era cuando fueron capturados». El Cuarto Convenio de La Haya dice que «en todas las circunstancias, su persona, su honor, sus derechos familiares, sus convicciones y prácticas religiosas, sus hábitos y sus costumbres deben ser respetados, sin distinción alguna desfavorable por razones de raza, religión u opiniones políticas/.
La custodia legal de Sadam Husein está a cargo del Gobierno iraquí. Pero su encarcelamiento físico es todavía responsabilidad de las fuerzas de seguridad estadounidenses. Cuando fue detenido, en diciembre de 2003, Donald Rumsfeld explicó que «el ex dictador está en un lugar secreto donde es interrogado en calidad de prisionero de guerra conforme a la convención de Ginebra». Nada más lejos de la realidad. Porque un diario sensacionalista británico ha publicado fotos del ex dictador en calzoncillos y lavando su ropa. El Ejército estadounidense anunció ayer que ha abierto una investigación para descubrir quién filtró las imágenes. Lo que es tanto como aceptar que alguien con responsabilidad consintió que se hicieran. A menos que sean un montaje o correspondan a un doble de Husein no sólo no se ha reparado el trato inhumano a que fue sometido en la revisión capilar y dental tras su detención, sino que se han violado de nuevo todos los acuerdos internacionales sobre los prisioneros de guerra. Por mucho que Husein vaya a ser sometido a juicio por genocidio y crímenes de guerra, la utilización de su imagen para minar la resistencia iraquí es un acto reprobable.//
6 comentarios
cgj -
Rôvënty -
Ese es el verdadero poder. El mundo sólo por viejo es sabio y cada uno se forja su propio destino.
teresa -
terreno de reclutamiento para grupos terroristas como Al Qaeda.
Anónimo -
terreno de reclutamiento para grupos terroristas como Al Qaeda.
Elisa -
Claudia -