La clave de la dedicatoria está en /un/. Cada uno lleva el suyo, siempre. Hay que permitirle que a-flore, que se des-cubra, se des-vele. No acogotarlo, no regarlo en demasía ni buscarlo con ansiedad. Abrir espacios de encuentro. No es campo para experimentos ni asunto de esfuerzos, sino de experienciar la vida que siempre sale al encuentro. Basta con atreverse a caminar con el corazón a la escucha, abierto, sin prejuicios capaz de comprender que correr contra el viento es la única manera de alzar el vuelo. Nesemu
Nesemu para Sergio -
No es lo mismo anomia:/estado de aislamiento de un individuo o de desorganización de la sociedad, debido a la ausencia o incongruencia de las normas sociales/(aproximación al caos cuyo vértigo puede suscitar o la revolución o movimientos libertadores) que la anomalía:/discrepancia de una regla, irregularidad/... bueno, a algunos nos gusta ser heterodoxos: otra opinión, por oposición a la, a veces, castradora ortodoxia. una opinión que pudiera llevarnos a un dogma intransigente.... o a un pensamiento único. ¿Te suena, Sergei? Prefiero una anomalía consciente a una excepción /otorgada/ por poder establecido alguno. No quiero excepciones. Quiero poder ser yo mismo. Nesemu
Rôvënty -
Estoy de acuerdo con Carlos. Todos llevamos un Juan Salvador Gaviota. Es la parte que nos incita a seguir cuando desfallecemos, que nos ayuda a levantarnos si nos caemos, que nos hace volar, soñar... En quienes no se manifiesta no es que no exista, sino que lo han perdido. Han perdido una parte de sí mismos.
Carlos Miguélez -
Yo sí creo que todas las personas llevan un Salvador Gaviota dentro. Lo que pasa es que algunos lo tienen muy escondido.
5 comentarios
Nesemu para Alberto y para Carlos -
Nesemu
Nesemu para Sergio -
Nesemu
Rôvënty -
Carlos Miguélez -
Sergio -
Pero las excepciones no son anomalías. Quizá son más normales que ninguna otra cosa. Quien sabe.