La limpieza étnica de Palestina. Ellos sí tenían su territorio, y estaban arraigados
La limpieza étnica de Palestina
Ilán Pappé, Crítica, 2008.
Los israelíes conocen como “Guerra de la Independencia” la de 1948, para los Palestinos es la “Nakba”, la “catástrofe”, puesto que su resultado fue uno de los procesos de limpieza étnica más amplios y dramáticos de nuestro tiempo: cerca de un millón de palestinos fueron obligados a emigrar a punta de fusil, abandonando sus tierras, sus bienes y sus hogares; hubo matanzas de civiles como la de Deir Yassin y cientos de poblados fueron destruidos deliberadamente.
A principios del siglo XX un periodista judío de nacionalidad británica, Israel Zangwill, popularizó uno de los grandes eslóganes del sionismo conquistador: "Una tierra sin pueblo, para un pueblo sin tierra"; lo que implicaba que en Palestina, dividida en varias provincias, conocida como Siria del Sur, y perteneciente al imperio otomano, estaba allí, sin población significativa, literalmente esperando que "un pueblo sin tierra", lógicamente el judío, que había morado en aquellos parajes dos mil años antes, volviera a reclamar lo que nunca había dejado de ser suyo.
Pese a sus dramáticas dimensiones, los israelíes han conseguido ocultar este crimen contra la humanidad durante muchos años.
Ilan Pappé, profesor de la Universidad de Haifa y el más prestigioso a escala internacional de los historiadores israelíes, obligado a publicar sus obras en el extranjero y a vivir en su país entre amenazas de muerte, revela en este libro, a la luz de documentos recientemente desclasificados, la verdad de una expulsión en masa que sigue haciendo hoy imposible la paz entre israelíes y palestinos, y que está en el origen de todos los problemas actuales del Oriente Próximo.
Todo esto es ya casi un lugar común fuera de Israel, e incluso en el Estado sionista una parte creciente del público admite que las cosas fueron más o menos así, por lo que Pappé sólo se diferencia de otros revisionistas en que, aparentemente, ha dejado de ser sionista y, por ello, sus juicios son mucho más duros, y sobre todo, morales y políticos. Y así, el autor, aunque completa datos, revisa casos, matiza cuestiones, no cuenta una historia fundamentalmente distinta de la que conocemos de obras -suyas y de algunos de sus colegas- salvo en que formula la terrible acusación de que la guerra para la fundación del Estado fue una "limpieza étnica", términos de indigna recordación por los recientes desafueros balcánicos.
Ilan Pappé, el historiador israelí más valiente, incisivo y comprometido, abre con este libro una nueva línea de investigación sobre el vasto y controvertido tema de los refugiados palestinos. Su obra nos recuerda cómo fue en otros tiempos la vida de los árabes palestinos e invoca la imagen de lo que podría haber sido una Palestina mejor, en paz y ajustada a un auténtico derecho.
Es un libro de imprescindible lectura para no dejarse enredar en la maraña de embustes, mentiras y propaganda sectaria que sólo obedece a un delirio que produce muerte, exclusión, persecución y genocidio de un pueblo que sí tenia tierra y arraigo.
0 comentarios