Retazos de la Luna Azul 042: No te fíes de las apariencias
- Maestro, le dijo Sergei con una amplia sonrisa – hoy estás como unas castañuelas. Da gusto verte. Desde que me he levantado te he visto por el jardín y parecía que saludabas a las flores.
- No, liebre curiosa, les cantaba canciones que en mi niñez escuchaba a mi madre durante esta época. Mi madre se llamaba Luz de Otoño.
- ¡Ahí va!¿Has tenido buenas noticias?
- Sí, Sergei. Los ojos son horizontales y la nariz vertical.
- Eso es lo que respondió a los monjes el patriarca Dogen cuando regresó a Japón después de su peregrinar por China.
- Pues eso, Sergei, pues eso. Estamos viviendo. Luce el sol. El té estaba bueno.
- Y el zumo de naranjas con ese toque de jengibre.
- Y esas galletas de canela que nos envió la viuda de Nanking. ¿No la tendrás desatendida y busca recomendaciones?
- No se preocupe Maestro, yo soy un cumplidor cabal.
- ¡Sergei, qué lenguaje! Escucha lo que le sucedió a un joven apuesto, alto, sonriente y muy inteligente que se encontró con un sabio en la ciudad de Shiraz. Éste le preguntó quién era. “Soy el Diablo, Venerable Señor.” “¡No es posible! – respondió el hombre santo -. ¡El diablo es feo y malvado, hortera y huele a azufre!” “Ay, amigo mío, ¡has estado escuchando a mis difamadores!”
José Carlos Gª Fajardo
4 comentarios
Sergei -
Nesemu -
lAuRaaaaaaa -
Sergei -
... a veces se tuercen las cosas.
¿Qué toca entonces? ¿Cómo recomponerlo?