Blogia
J. C. García Fajardo

La salud mental, la epidemia más discapacitante, debe atenderse desde los ambulatorios

La psiquiatría llegará al ambulatorio
Sanidad y comunidades acuerdan una estrategia de salud mental porque un 10% de la población padece trastornosleves que sube al 10% cuando se suman las depresiones leves, la ansiedad, las fobias y otras condiciones que rara vez llegan al especialista. El Ministerio de Sanidad ha logrado que todas las comunidades autónomas pongan en común una estrategia única de salud mental cuyo primer objetivo es preparar a los médicos de atención primaria: ellos son los únicos que pueden gestionar un problema que afecta a más de 4 millones de personas.
Además, el plan incluye una vertiente pedagógica: se precisa también una cierta alfabetización psiquiátrica de la sociedad, empezando por dos de los principales grupos de riesgo: los adolescentes y las familias que cuidan a enfermos neurológicos.
Los trastornos mentales no son cosa de broma. Cuestan en España más de 3.000 millones de euros al año entre fármacos, gastos de hospitalización, pérdida de horas de trabajo, pensiones de invalidez y muertes prematuras, y suponen para Europa una mayor carga que el cáncer y las enfermedades cardiovasculares (las dos primeras causas de muerte en los países desarrollados).

La ministra de Sanidad presentará hoy la Estrategia en salud mental del Sistema Nacional de Salud en una jornada pública en Madrid, junto a una quincena de científicos y gestores sanitarios internacionales. Es el primer resultado de un acuerdo alcanzado en diciembre por todas las comunidades autónomas (en el Consejo Interterritorial, órgano de coordinación entre las administraciones) para "mejorar la atención a los pacientes, reducir el estigma y la marginación a que se ven sometidos e impulsar la prevención, el diagnóstico precoz, el tratamiento, la rehabilitación y reinserción social". Como otras iniciativas similares (estrategias del cáncer, cuidados paliativos) 
"Tanto los médicos no especializados como la sociedad tienen que concienciarse de que los trastornos mentales son muy frecuentes, y de que van en aumento", afirma el director general de la Agencia de Calidad del Sistema Nacional de Salud, Alberto Infante, responsable de la nueva estrategia. "El aumento se debe en parte a que se diagnostican más casos, pero también a que surgen más. La vida era antes más sedentaria, menos competitiva, la gente se sentía más apoyada por el entorno local, más amparada en sus referentes territoriales".
Infante destaca enseguida que 9 de cada 10 trastornos son leves o moderados: "No imposibilitan, y en general responden bien a los tratamientos actuales". El problema es que muchas veces los tratamientos no llegan a los pacientes porque el médico de primaria no lo diagnostica.
Un caso muy común, explica el director general, es el de la mujer que llega a la consulta quejándose de dolores de cabeza, o de su dificultad para conciliar el sueño. Como su médico no está buscando los signos de una depresión, es dudoso que los encuentre, pero eso es lo primero que debería sospechar si supiera que ella lleva 10 años cuidando en casa a un enfermo de Alzheimer, o a un esquizofrénico. Sin tratamiento, la depresión irá a peor y puede cronificarse.
El cuidado de un paciente con esquizofrenia supone de 6 a 9 horas diarias para las personas que los cuidan, generalmente mujeres. El nuevo plan considera esencial que estas familias con enfermos mentales graves a su cargo reciban apoyo psicológico. Para ello, sin embargo, es necesario antes que los médicos generales aprendan a detectarlos, y se acostumbren a considerarlos como una población de riesgo. El Ministerio está editando unas guías muy detalladas para ellos.

LA EPIDEMIA MÁS DISCAPACITANTE
-Una de cada 10 personas sufre un trastorno mental leve. Una de cada 100, uno grave.
-La Estrategia de Salud Mental centra en los médicos de primaria el diagnóstico y tratamiento de estos enfermos.
-El plan hace hincapié en adolescentes y familiares de enfermos.
-Los trastornos mentales son una carga sanitaria mayor que el cáncer y las enfermedades cardiovasculares.

15 comentarios

mikel -

hola me llamo mikel y vivo en un pueblo de huelva y yo sufro un problema paraecido a lo que mencionais,resulta que mi madre tiene 41 años y lleva con trastornos de la personalidad esquizofrenia y paranoya aguda,bueno si dicen que la seguridad social esta avanzando y que los medios de tratarlos estan aumentando pero en este caso nosotros los que nos hacemos cargo de ella pues no podemos con ella tenemos que estar costantemente pendiente de ella sin poder trabajar porque salia de casa y le pegaba a la gente mi abuela tiene 70 años y ya no puede con ella nosotros sus hijos el que es mas grande tiene 20 años llebamos haciendonos cargo de su enfermedad muxo tiempo y ya no podemos mas la seguridad social no hace nada y los centros privados te cobran 100euros al dia !QUIEN PAGA ESO! y no sabemos que hacer.

Rocío Romero Molina -

Debemos plantearnos porqué los trastornos mentales van en aumento. Si van en aumento no es por casualidad, el mundo actual los ocasiona.
Las diferencias entre el mundo rural y el mundo urbano son una de las principales consecuencias. Aunque no son las únicas porque nos encontramos en un mundo inhumano, lleno de hipocresía, competitividad extrema, un mundo intolerante.

Y ahora quieren que los médicos de cabecera tengan conocimientos un poco más amplios para poder tratarlos. Como estos trastornos suponen un gran gasto económico mi opinión es que por eso quieren hacerlos frente.Aunque a la vez que se busquen soluciones a estos problemas es beneficioso para la sociedadbien , un médico de cabecera debe saber sobre todos los campos de medicina para poder juzgar y mandarte a un especialista. Los médicos de cabecera deberían contextualizar la situación de sus pacientes yo creo que de esta forma podrían detectar en sí el problema de ese individuo. La responsabilidad de un médico es enorme porque en sus manos tiene la vida de una persona.

Por otro lado creo bastante beneficiosa la ayuda sicológica a los familiares y gente que rodea a las personas con problemas mentales , ya que los sicólogos pueden ayudar a estas personas a enfrentarse a su situación . Además con la ayuda a los jóvenes se pueden evitar algunos de los trastornos mentales.

Rocío Romero Molina

Sylvia -

Apoyo esta iniciativa ya que resultará de gran ayuda puesto que en los últimos años estos casos se han incrementado y a veces son difíciles de detectar. Por ello creo que es bueno que los médicos de los ambulatorios traten esto y se formen un poco más, para poder dar mejores diagnósticos y más acertados.

verónica herrero martín -

Me parece totalmente acertado llevar la psiquiatría a los ambulatorios, ya que es una parte de la medicina que hasta ahora se llevaba a cabo en centros específicos y diferentes para tratar enfermedades mentales que ya estaban diagnosticadas, pero había un gran número de ellas que no se diagnosticaban en los ambulatorios. De este modo, podrán descubrirse mayor número de casos de enfermedad mental, tales como depresiones. Esta clase de enfermedad mental es muy común y en muchos casos no se diagnostica. De este modo,podrán atajarse más pronto los problemas mentales de la gente que los sufre y se podrá evitar que tengan mayores consecuencias para ellos.

A. Olea -

En este mundo en que creemos tener remedio para casi todo, los enfermos mentales son los grandes olvidados. La iniciativa de Sanidad debería sentar precedente y no limitarse a los centros de atención primaria, sino invertir mucho más en centros especializados. Por la salud metal de la sociedad entera.

EVA ALMARCHA CUBERO -

EStoy totalmente de acuerdo en que se lleve a cabo un trabajo de "enseñanza" hacia médicos y familias que cuidan de personas con problemas cerebrales. LA vida cada vez es más dura y eso tiene como consecuencia todos los problemas de la sociedad. Seguro que hace unas décadas no había ni la mitad de enfermos que existenen este momento; los habría, por supuesto, pero no tantos.
El hecho de que a las familias o familiares se les inculque ciertas "bases de medicina" también me parece lo correcto. Puesto que una persona que está al cargo de un enfermo debe saber síntomas, contraindicaciones, consecuencias, etc.etc. sobre dicha enfermedad. No debe ser un médico, puesto que ya los hay, pero sí estar debidamente informado.
En cuanto al hecho de que los médicos comiencen a detectar ciertas enfermedades, éso debe empezar en los años de enseñanza de la carrera, además, claro, de por parte de los propios médicos que estén ejerciendo.

alejandro estrada -

La salud mental afecta cada vez mas a mas personas, los avances en la medicina están avanzando progresivamente, pero todavía queda mucho, se deben hacer mas centros especializados para estas personas, mas gente cualificada...

Azahara Morales -

Los médicos en general tienen muchos fallos pero como todos son personas con sus defectos. Al menos es un avance que tengan ciertos conocimientos sobre estas enfermedades que cada vez están más extendidas. De esa forma conseguirán buscar soluciones más rápidamente.
Todo esto es muy positivo porque en la actualidad las familias estan mucho más ocupadas que antes y es dificil que haya alguien en casa que se pueda hacer cargo. Por ello los cursos y libros destinados a las familias que lo sufren serán una buena medida para prevenir sucesos futuros.

Elia Pesquera -

está claro que los tiempos están cambiando. antes los enfermos mentales eran ingresados en psicriaticos y ahora ya no existen. se les hospeda como mucho en hospitales, pero la mayoría están en casa. Los que tienen familia que les controle o les cuide bien, tienen problemas pero al menos les controlan, pero hay muchos que están solos y que no se controlan y dejan la medicanción, etc. además pueden suponer un peligro. qué hacer? no lo se.
Saludos

Paula s.T. -

Sin duda son gratificantes estas iniciativas porque, pese a que a medida que pasa el tiempo se diagnositcan más enfermedades mentales, la realidad es que el número de gente que las padece es muy elevado y si, como hasta ahora, el médico primario al que acude el enfermo no era capaz de ver que aquéllo que se manifestaba con una dolencia física no era otra cosa que una consecuencia de un problema de salud mental, la cifra que estimamos engloba este tipo de enfermos no se acerca a la cantidad real. Así, es posible que, pasados unos años tras la puesta en marcha de este proyecto, ascendienda la cifra de 4 millones de afectados por enfermedades mentales.

Noelia (Roja) -

En una de cada cuatro familias, al menos uno de sus miembros puede sufrir un trastorno mental. Estas familias no sólo proporcionan apoyo físico y emocional, sino que soportan las consecuencias negativas de la estigmatización y la discriminación. No formemos parte de esa sociedad que aparta la mirada...

jose navareño garrido -

Para mi la medicia sigue siendo un mundo. Si que es verdad que hay veces que los medicos por no hacer bien su trabajo una enfermedad no frena y puede traer grandes consecuencias. Yo no creo realment que las personas marginen a los enfermos mentales sino que ,el ser humano por miedo a no se que tiende a marginar a cualquier tipo de enfermo.

Alicia Martín -

Muchas veces los médicos no te diagnostican lo que tienen, te dicen que es un simple dolor de cabeza que se quita con una aspirina cuando lo que tienes es una enfermedad mucho más seria. En cuanto al tiempo que pasamos con las personas discapacitadas mentales es muchisimo menos que antes, pues ahora preferimos estar por ahi y con nuestras cosas. Nos hemos vuelto mucho mas egosístas...

Ramón Angulo -

Perdón, me olvidé de decir que mi anterior post es del Editorial que hoy viene en El País y que apoya y amplía la tesis del blog.

Ramón Angulo -

La psiquiatría se ha ocupado hasta ahora sólo del 1% de la población. Son los pacientes de esquizofrenia y trastorno bipolar, con trastornos mentales "graves", los únicos hasta hace poco que se consideraban dignos de una consulta. Pero ningún especialista duda ya en clasificar como trastornos mentales, bien que "leves o moderados", la depresión, la ansiedad, la fobia, el estrés traumático y otras condiciones que afectan a otro 9% de la población. La medicina sabe tratar la mayor parte de esos casos, pero el sistema no funciona: es mucha gente (uno de cada diez ciudadanos) para ir al psiquiatra. Diagnosticar al 10% de la población requiere un ejército de médicos de atención primaria, y ése el principal objetivo de la estrategia de salud mental que han puesto en marcha, en un acuerdo unánime, el Ministerio de Sanidad y las 17 comunidades autonómas. Un raro ejemplo de racionalidad científica en estos tiempos.
Los trastornos mentales cuestan en España más de 3.000 millones de euros al año en fármacos, gastos de hospitalización, pérdida de horas de trabajo, pensiones de invalidez y muertes prematuras, y el objetivo europeo es que supongan el 10% del gasto sanitario en 2010. Pero España no está lejos de esas cifras, y el mayor problema no es económico. La atención a un paciente con esquizofrenia supone de seis a nueve horas diarias para las personas que los cuidan, generalmente mujeres. Estas personas, como las que tienen un enfermo de Alzheimer en casa -que son muchas-, necesitan apoyo psicológico, y a menudo tratamiento con fármacos antidepresivos. Pero no lo tendrán si los médicos generales no se habitúan a considerarlos como población de riesgo. El plan incluye los programas de formación necesarios para ello.
La estrategia también presta atención a los adolescentes. La prevención es tan importante en la medicina de la mente como en la del resto del cuerpo, y hay dos claros factores de riesgo evitables para la salud mental en el consumo de alcohol y de drogas en la adolescencia. La psiquiatría clásica ha experimentado un salto de gigante en España en sólo 25 años, evolucionando desde una situación de virtual subdesarrollo hasta un nivel equiparable a los países con sistemas sanitarios más avanzados. Pero ésa es la psiquiatría del 1% de la población, y el reto es hacerla bajar a la consulta de atención general. Es un camino a medio hacer en todos los países, en el que España está aún peor que el resto.