No podremos decir que no sabíamos que, a la vuelta de la esquina, viven personas mayores en soledad y necesidad que necesitan nuestra presencia
La cara oculta de nuestra pobreza
El Ayuntamiento calcula que 1.600 personas carecen de hogar en la capital, pero las ONG elevan la cifra a más de 6.000
El pasado martes hubo una llamada internacional: el Día por la Erradicación de la Pobreza, y ayer culminó con una manifestación en la capital una semana de lucha contra la exclusión social. Aunque parezca invisible, la pobreza en una gran urbe como Madrid existe y tiene miles de rostros. Es la cara de las personas sin hogar, de los indigentes, de las mujeres mayores de 65 años que se mantienen con pensiones ínfimas y en casas en malas condiciones, de jóvenes ahogados por la precariedad, de los refugiados políticos y de los inmigrantes sin apoyos familiares ni de grupo. El Ayuntamiento cifra en 1.600 el número de personas sin hogar, pero Cáritas y otras asociaciones elevan el número a 6.000.
Más de 103.000 mujeres mayores de 65 viven solas, según los últimos datos censalesMadrid es también una ciudad de pobres. Bajo las espesas alfombras de la opulencia con que la macroeconomía cubre la capital, malviven miles de personas sin hogar, ancianos solos con pagas de miseria, familias con múltiples problemas que les inundan, más allá de la falta de dinero. También hay jóvenes e inmigrantes que se ven ahogados por la precariedad y ya no gozan del apoyo familiar y de grupo, debilitados éstos por el cambio social general. El pasado martes se celebró en todo el mundo el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza. Mucho queda por hacer aquí, en el portal de casa, donde vive la exclusión.
5 comentarios
Hormiguero -
Ana -
Gelys Martínez Méndez -
Marta -
Algo pasa cuando los mayores mueren solos y se les echa en falta cuando los vecinos se percatan del olor. Algo pasa cuando hay más de 4000 viviendas de once metros en el centro de la capital, cuando aun así, los propietarios de los inmuebles amenazan con no hacer reformas, ni desinfectar las letrinas comunes, ni poner agua corriente, para librarse de los inquilinos de renta antigua.
Algo pasa cuando una pareja de ancianos vivió todo el verano en la parada de un autobus, a 50 metros del edificio de Telecinco, y nadie dijo nada.
Se puede ayudar a los sin techo, es cierto, pero si las cosas siguen así en breve serán el doble, y luego el triple, porque no será posible subsistir, pagar una casa, un transporte, una alimentación, un abrigo, con los sueldos y los precios.
Algo pasa cuando las ONGs ayudan y los gobiernos no miran. Eso, sí... que bien le queda la corona a la Reina cuando viene de visita el Presidente de Portugal y hay cena de gala en uno de los tropecientos palacios, con tropecientas salas, y tropecientos años de historia.
Y luego pedimos el 0,7%...
Marta Gálvez Z. -