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J. C. García Fajardo

El derecho a divertirse y el deber de respetar a los demás

- Cuaderno de Bitácora
Abramos un debate sensato sobre el denostado "botellón". Derechos y excesos. No todo vale, ni siquiera las prohibiciones generalizadas. Existe un derecho irrenunciable por parte de los jóvenes a reunirse y divertirse sin tener que pasar por los desmesurados precios y riesgos de la cultura del garrafón en centros privados. También existe el derecho no menor a que los ciudadanos puedan dormir y descansar,  a que no se invadan espacios públicos y queden destrozados y llenos de inmundicias para que las limpien otros. Es preciso que las autoridades habiliten espacios adecuados para poder divertirse respetando los derechos de los demás. En el denominado botellón no todo vale.  En cuanto al consumo de bebidas alcohólicas, y ya no digamos de substancias psicotrópicas, es un tema de educación y de autocontrol que no puede pretender una patente de corso. Hay muchos jóvenes que quieren reunirse para pasarlo bien, para "echarse unas risas" y nadie está obligado a consumir lo que no desee ni a comportarse como auténticos vándalos. Es decir, a actuar responsablemente dentro de sus parámetros y no como quisieran algunos, de una lado y del otro. Igual sucedió con el tabú del sexo, de la libertad de conciencia, de reunión y de expresión. Algunos agoreros pronosticaron una hecatombe ignorando que la gente aprende a comportarse civilizadamente y sabe y tiene derecho a exigir el respeto de los demás. Nesemu

28 comentarios

GGG -

CHIDO

oscar daniel -

el respeto antes de exijirlo se da y ay si se reclama

luis enrique -

el respeto se mantiene teniendo en cuenta que nuestros derechos tienen un limite, controlando nuestras reacciones

luis enrique -

el respeto se mantiene teniendo en cuenta que nuestros derechos tienen un limite, controlando nuestras reacciones

jesus -

Los jóvenes franceses han salido a la calle ha protestar por los nuevos contratos de trabajo del gobierno francés para menores de 25 años.

Mientras los jóvenes españoles han salido a la calle a intentar batir records de asistencia a botellones.

Sin palabras

Dorian Gray -

No he hecho nunca ni haré ninguna de esas cosas. No he dicho que esté a favor de las quedadas multitudinarias para ver que ciudad se emborracha más. Sencillamente eso de quedar por internet para medir fuerzas etílicas me parece una estupidez. Me está usted diciendo que no haga cosas que nunca se me han pasado por la cabeza. No se puede generalizar, no todos los jóvenes quedan para hacer un macrobotellón por internet.
Los niños de 12 y 14 años son muy maleables, y lo digo porque no hace mucho fui un niño de 14 años, de su educación se deben encargar los padres. Ellos saben si su hijo es maduro o no, hasta que hora pueden dejarle salir, etc, etc. No se nos puede cargar con la responsabilidad de dar buen ejemplo a las nuevas generaciones de adolescentes. No quiero hacer publicidad de el alcohol, tiene unas consecuencias negativas que todos sabemos, sólo defiendo el derecho que tenemos los jóvenes, ya adultos, para divertirnos y hacerlo respetando a los demás. No sé si estamos hablando de cosas diferentes, en ningún momento apoyé los macrobotellones...

Sagrario -

Pues el día que decidas hacerlo, igualmente que el día que decidas hacer botellón intenta hacerlo sin que te vean chavales de 12 ó 14 años. Ni le deis publicidad. NI salgais por la televisión, ni quedeis en internet, ni por favor que no les llegue a esyos chavales por móvil el día y la hora que habeis quedado.

Sólo lo digo por respeto a los niños, que os ven, os oyen, os leen en internet y les llegan mensajes a sus móviles.

Más que nada sólo por eso.

Gracias.

Dorian Gray -

Querida Sagrario:

Yo no estoy haciendo apología del botellón, estoy defendiendo el derecho a hacerlo y a consumir alcohol de forma razonable. Cada cual es dueño de su cuerpo y puede hacer con él lo que le venga en gana, le guste a usted o no. Por mi parte nunca me he empastillado ni me he metido rayas, simplemente no me atrae, pero si alguna vez me apetece no dude de que lo haré. Respecto al vidrio, ese es un problema, la gente que acude a los botellones debe recoger las botellas, las bolsas y toda la basura que genera. También respetar a los vecinos que quieren dormir e ir a un sitio más apartado. Yo reivindico tanto la libertad como el respeto a los demás. Muchas gracias. Mi cerebro también me pertenece.

Sagrario -

También nos pertenece el cerebro. Y ya de paso podrías proponer una quedada para drogarnos todos, empastillarnos y meternos unas rayas.

Además no hay problemas con el vidrio de las botellas, y nos ahorramos en vasos.

Total, No hacemos daño a nadie.¿ O no?

Dorian Gray -

A nadie se le pone una pistola en la sien para que beba. Es una decisión libre, por mucha publicidad o presión que nos hagan llegar no consumimos hasta que queremos. La mayoría sabemos lo que es el alcohol y sus consecuencias. Tomarlo es una decisión libre y razonada. Cuando nos reunimos entre amigos para pasarlo bien consume el que quiere, el que no, bebe un refresco o no bebe. La solución al conflicto con los vecinos sería recoger la basura que se genera durante el botellón y armar menos ruido en un sitio más alejado de las viviendas. El hígado nos pertenece.

Juan Francisco Corcuera -

Nos hallamos ante el eterno conflicto que se genera por la prevalencia de los derechos. Aquí cabe el aserto con el que se pretende resolver esta disquisición: \\\\\\\"Los derechos de unos comienzan donde acaban los de los otros\\\\\\\". Salvo que la dimensión de las situaciones que se generan en las grandes concentraciones exige que esos niveles de respeto se eleven y, sobre todo, que se cumplan. Del derecho al ocio y al divertimento de los jóvenes al derecho al descanso hay una geografìa muy amplia de actitudes. Pero es evidente que este ámbito se escapa del planteamiento personal. No lo hace, sin embargo, el hecho de que un joven tome sustancias psicotrópicas o, vulgarmente, drogas. Aquí concurren dos cuestiones: por un lado, la educación recibida en el ámbito familiar; por otro, la que se asimila en el colegio y en el estrato común de lo público. De ambas depende que un joven esté bien informado sobre qué son las drogas y cuáles son sus efectos. Si aún con una educación en la que ha primado la información, el o la joven decide probar una sustancia de esas características, es imposible de controlar mientras esté al alcance de cualquiera. Los vacíos generacionales en algunos asuntos son cada vez más difíciles de llenar. La propia sociedad diseña unos modelos contra los cuales es cada vez más difícil ejercer una oposición. Mis padres, por ejemplo, educacaron a sus seis hijos con flexibilidad; pero tuvieron que adoptar actitudes bien diferentes ante situaciones en las cuales estaba yo implicado que ante otras en las que el protagonista fue mi hermano pequeño, del que me distancian catorce años. Y supongo que mi función como padre en la educación de mi hija, que tiene ahora tres años y medio, será bien diferente a la que mis padres mantuvieron con sus vástagos. Pero en una cuestión seguro que coincidimos: que le sobre la información para que conforme unos criterios amplios que le lleven a tomar las decisiones a partir de un convencimiento de que aquello que haga o diga es lo que de verdad busca.

jesus -

Estimado Zola:

El que bebe y compra no lo hace porque quiere. Sería un argumento demasiado simplista.O acaso me vas a decir que no existen otras motivaciones e influencias de medios de comunicación, de familia, de amigos..... Sigo negándome a pensar que el botellón puede ser un medio de sociolazización positivo.

Con respecto a lo que argumentas que los bares están llenos de gente borracha no muy joven , permita al menos que lo dude.

De hecho las estadísticas del SAMUR, en relación a casos atendidos por coma etílicos, en el año 2005, casi el 85% correspondían a jóvenes menores de 25 años.



Zola -

¿ Que se fomente el encuentro de jóvenes para beber? No es esa la idea del botellón, creo que ya hay gente que lo ha explicado bien.
No creo que estés en contra de eso, porque si no también pedirías que cerrasen los bares, cervecerías y pubs. Yo comprendo que te pueda molestar y quieras que se acabe con él porque no te dejen dormir o porque dejen tu calle llena de basura, pero no pongas como motivo contra el botellón que "fomenta el encuentro de jóvenes para beber". El que bebe y el que "compra" lo hace porque quiere. Ya cansa que se nos trate a todos los jóvenes como drogadictos en potencia. También los bares están llenos, de Lunes a Domingo, de gente no muy joven y borracha. No por eso se va a pedir cerrarlos,se entiende que nadie tiene por qué beber alcohol cada vez que se entra en uno.

Jesus -

A nadie le puede parecer mal salir con los amigos a tomar unas copas al aire libre y encima ahorrándote unos cuantos euros. No se hace mal a nadie evidentemente. Pero el espíritu de la mayoría es otro.

Dentro del botellón se celebra el \"Porrón\", el \"Rayón\" y el \"Pastillón\" y es un campo abierto tanto para el que quiere vender como para el que le falta poco para comprar.

Evidentemente que estoy en contra de restricciones, pero nunca podré tolerar que se fomente el encuentro de jóvenes para beber.

Jarkoe -

De acuerdo con Zola, el botellón es una forma de diversión. En ella tan sólo una mínima parte prefiere dejar la diversión de todos a un lado, porque el sano y justo respeto hacia la sonrisa de los demás no sea muy bien comprendido o por yo que sé qué (sería positivo conocer esa razón). Pero eso no permite condenar una práctica tan agradable, tan libre, que tantos preferimos a otras.Evidentemente son muchas las alternativas; pero con el respeto a los demás ésta es, en mi opinión, un placer por todo lo que permite compartir. Con facilitar zonas de acceso apropiadas, cercanas y que todos nos comprometieramos a cuidar sería la mejor solución, sin duda. ¿¿Porque para reunirme con los amigos en Mérida tengo que irme a Estocolmo?? (me pregunto). Es sólo un ejemplo (ejem...).

Zola -

No se puede decir que en el botellón la gente va a ponerse ciega. En el botellón no se bebe porque sí, el botellón es una forma de divertirse con los amigos mientras se disfruta del aire de la calle, sin estar obligados a respirar ambientes cargados de humo del tabaco, sin que nos envenen con alcohol mezclado y sin que atraquen a los estudiantes en cada barra con precios abusivos incluso por refrescos. Además, nadie te obliga a tomar más copas de la cuenta. En todo caso serán los menos los que van a beber el mayor número de copas posibles.
El botellón tiene muchos aspectos positivos, hasta para la gente sana que sólo busca un rato de diversión con los amigos.
También conocemos sus aspectos negativos, pero eso no quiere decir que nos gusten. Preferimos actuar de la forma más cívica posible cuando hacemos el botellón, y exigimos que se pongan remedios, de manera que la diversión de unos no suponga molestias a los demás.
No vale con decir lo guarros que somos o lo lo malo que es el botellón. Ante todo problema se deben buscar solucciones. Hay que cambiar nuestra actitud para que pueda cambiar la de los demás.

Anahi -

Un botellón no deja de ser una forma de reunión: buenos amigos, risas y algo para refrescarse. Botellón no tiene porqué significar coma etílico. SE puede beber con moderación, pero a mi modo de ver, este no es el significado del botellón. Cierto es que te sale más barato comprarte 1 litrona que ir a un bar y beber un botellín. Cierto es que se molesta a los vecinos y hay un alto grado de suciedad en parques y demás los fines de semana. Los jóvenes podemos recoger lo que ensuciamos, porque al fin y al cabo, a esos parques llevaremos a nuestros hijos el día de mañana y si lo estropeamos.. Pero también para no molestar el gobierno podría establecer \\\"botellódromos\\\", donde poder estar sin molestar a los de alrededor. Responsabilidad por parte de uno y ayuda por parte de otros podría establecer un acuerdo. También el botellón e sun problema para los locales, pero el garrafón puede llegar a hacer más daño que una simple resaca.
Divertirse es bueno, un vaso de vino dicen que es bueno para el corazón. Todos sabemos que bebe el que quiere.

Dorian Gray -

En el botellón se unen dos factores: amigos y alcohol. Es una manera de pasarlo bien y echarte unas risas entre amigos... Nadie va sólo y solo a por alcohol. Se juntan ambas cosas. El problema es que sigue habiendo gente que no respeta a los que queremos salir y beber los fines de semana, que no simplemente salir a beber. Muchos ya somos mayorcitos como para controlarnos. Los menores son controlados por sus padres o tutores, que son los que tienen potestad para ello.

El ruido y la suciedad se pueden controlar si se actúa responsablemente. Igual que los jóvenes tenemos derecho a divertirnos como nos dé la gana, también tenemos la obligación de no dañar a los demás, a la gente que quiere descansar y ver sus calles limpias al día siguiente. Creo que si esto se consigue se acabarán las polémicas.

leticia -

Si el botellón molesta, es tan sólo porque los garitos no ganan dinero. Tampoco se puede generalizar con lo del ruido, además hay personas y personas, porque las vecinas del se quejan hasta por respirar. Tenemos que ser un poquito más tolerantes y respetuosos.

Héctor -

Yo no estoy en contra del botellón, y eso que no bebo ni voy nunca a ninguno. Es una actividad de ocio más para los jóvenes, que siempre que se respeten unas ciertas normas no tiene porqué ser perseguida. Lo que me parece muy fuerte es que se anuncie el macrobotellón del día 17 como un concurso a ver quién se pone más borracho...

jam -

El último comentario es en muchos aspectos acertado, al menos bajo mi punto de vista. Pero no coincido en todo con él. Yo no bebo (cosa rara, ¿no?) y sin embargo sí estoy a favor del botellón. No creo que debamos resignarnos a aceptar que cada vez nos limiten cada vez más nuestra capacidad de acción. No se si es que el ambiente en el que yo me muevo es muy distinto, pero rara vez (lo que no quita de que sí que haya ocasiones en que pase) veo a gente que no se tenga en pie. La mayoría de la gente concibe el botellón como una manera de empezar la noche. Cuando la gente sí que se va cayendo es cuando están en los bares y se han tomado unas cuantas copas más en el local. Estoy cansado ya de parecer un delincuente estoy con mis amigos de botellón y tener que aguantar la prepotencia de muchos (que no todos) los policías. No se molesta a ningún vecino cuando se bebe en un parque o en cualquier otro sitio que está alejado de las urbanizaciones.

jesus -

Sinceramente, no estoy de acuerdo con la mayoría de las opiniones que se están argumentando en este foro sobre el botellón.
En primer lugar con los que opinan( incluído el profesor)que al botellón acuden jóvenes para echarse unas risas y hablar con los amigos. No creo que debamos engañarnos. Al botellón se va a beber. Por supuesto que vas con tus colegas, pero a beber. Y a beber más barato que en los bares. Por lo tanto a beber más de lo que podrías beber una noche en una discoteca o de potes por las zonas de marcha de cada población.
También considero poco acertado el argumentar el hecho de que cada uno sabe lo que tiene que hacer o que tenemos la edad suficiente para hacer frente a nuestras responsabilidades. Creo que no se ajusta a la realidad.

Habrá un número, los menos, que acudan al botellón con la única motivación de pasar un rato agradable en compañía de sus amigos tomando una, dos o tres copas, pero hay muchos de lso cuales dudo que quieran controlar el número de decilitros que quieren beber.

¿Qué se puede hacer o cual es mi propuesta? No soy partidiario de que las Administraciones proporcionen locales a los jóvenes para el consumo de sustancias alcohólicas. No puedo apoyar una inicativa que promocione la diversión, el ahorro y el consumo de alcohol. No de esta manera.

La \"solución\"??? Nos la darán en breve, o qué pensais que va a pasar después de que cada día nos ponen más inconvenientes para fumar.

Estrada -

Es normal que los jóvenes acudamos al botellón porque los precios en los bares suelen ser descarados. Pero también es normal que las copas sean caras porque los impuestos son elevados y si tienen el bar es para obtner beneficios. ¡Cada uno vela por sus intereses! ¡Es lo que hemos aprendido toda la vida!
Creo que para evitar problemas se debería permitir hacer botellón en parques que estén un poco alejados de las casas y los que participamos en él debemos recoger todas las botellas, bolsas...
Con respecto al consumo de estas drogas creo que todos estamos suficientemente informados sobre sus consecuencias y si lo hacemos es porque queremos. Todos sabemos donde están nuestros límites y el que los pasa sabe lo que le va a ocurrir.

susana molina -

Los problemas de ruido y basura que genera el botellón, derivan de la actitud poco cívica y la falta de educación de algunos jóvenes. Está claro que a nadie puede molestar el hecho de que a las once o doce de la noche un grupo de amigos se reunan, por poner un ejemplo, en el parque del oeste, y haga el famoso botellón, ya que está más o menos retirados de las viviendas. Pero la comprensible incomodidad de los ciudadanos surge cuando la gente, teniendo un cubo de basura al lado( y aunque no lo esté- eso no debería importar-) llene el parque de botellas y plásticos. Así, las prohibiciones llegan cuando el pasotismo es absoluto.
Por otro lado, el exceso de alcohol que muchas personas consumen o el consumo que se hace por presión del grupo, reside en la propia irresponsabilidad e inmadurez, y en no tener definidas nuestras prioridades.
No soy partidaria de la ilegalización del botellón, pero viendo el estado en el que amanecen determinadas zonas de Madrid, es comprensible.

Cristina -

Me parece que los jóvenes hoy dia, disponemos de suficiente información sobre los efectos que causan a largo plazo o corto plazo, las drogas, incluidas el alcohol. Conozco a un persona que estuvo a punto de morir por un coma etílico, pero aún así sigue bebiendo, ¿porqué?, pues probablemente porque no sea consciente de que su vida ha estado al borde del precipicio, y es algo que nos puede pasar a todos, pero hay que saber controlar, y el principal problema es que no se sabe, y si se sabe, no se quiere.
Además luego también, están los amigos, que te llaman \"soso, o aburrido\" si no bebes, en cierto modo se sienten coaccionados ha hacerlo, pero ¿es mejor poner tu vida en peligro?
Por no hablar de la bebida que sirven en algunos bares, y de su precio, por supuesto nunca existe una relación calidad-precio, ¿entonces que quieren que hagamos? Si mejorasen esa relación no tendríamos que salir a la calle para tomarnos una copa, los primeros qeu no queremos pasar frío en invierno somos nosotros. Aunque por supuesto también creo que es necesario que se respete a la gente que duerme en sus casas.

Mariola -

El hecho de hacer botellón, no quiere decir que te vayas a poner ciego a alcohol, ni mucho menos, lo primero es que estás con tus amigos, echandote unas risas y tal, y cerciorándote de que al menos garrafón no estás bebiendo, además te ahorras, esos tantos de euros desmesurados, que pagarías en cualquier garito.
Eso sí, yo creo que recoger las botellas y vasos, y tirarlas al contenedor más cercano no cuesta nada, y evitas entre otras, que los niños que vayan a jugar a la mañana siguiente no corran el peligro de cortarse con ningún obstáculo.

Virginia -

Yo también entiendo el botellón como un rato de reunión de amigos, que sí que se bebe, vale, pero hay formas y formas: hay gente que sale con el único propósito de ponerse ciega (con alcohol y/u otras cosas), sea en un parque o sea en locales donde dan un garrafón que debe de destrozar medio hígado por cubata (conozco un sitio con copas a un euro... ya me diréis qué sirven ahí, yo misma vi una vez a un camarero rellenar a escondidas una botella de alcohol con una garrafa), y también hay gente que cuando bebe busca pelea por nada, o que deja todas las botellas tiradas por ahí en la calle o en un parque... No pido que construyan un \"botellonódromo\", pero uno puede beber en la calle con los amigos sin molestar a nadie y sin ensuciar nada, si quiere.

En fin, que para que no beban los jóvenes primero tiene que haber una buena educación que les advierta contra el alcohol y las drogas. Uno puede beber en su justa medida, pero lo que no es normal es que cada fin de semana haya varios comas etílicos en Madrid, muchos de ellos en menores de edad.

Javi -

Yo lo que digo es que los ayuntamientos propongan alternativas. Su actitud es cínica.Nos prohíben beber, nos critican por ser una "generación alcoholizada y drogadicta".Donde vivo, en Alcorcon, el Ayuntamiento hizo durante un par de meses actividades deportivas en un polideportivo, los viernes de madrugada.
Y el botellón no es el desfase padre.Yo no voy a un botellón a encharcar mi hígado. ¿Qué hay mejor que conversar y echar unas risas con los amigos de siempre?