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J. C. García Fajardo

Nesemu: Basta ya de políticos indignos

Ya produce asco hasta la nausea la discusión entre políticos nefastos que no quieren abordar la realidad de los sucesos del 11 de marzo. Escuchar a Zaplana y a Aceves, no digamos a ese miserable senador Cosigó calumniando al Rector de la Juan Carlos I, me parece de aurora boreal. Como no quiero entrar en eza discusión,lean por favor la entrevista a la Fiscal Olga Sánchez y al embajador en Vaticano Jorge Dezcallar que, entonces, era Jefe de los servicios de inteligencia de España... mientras tanto, lean este artículo de curtido periodista Enrique Meneses.
Nesemu

//¡Por fin, el asesinato de Julio César ha sido reconocido por el Congreso de los Diputados español en el minuto de silencio que se guardó el jueves por respeto a todos los asesinados por motivos políticos de nuestra Historia! El PP, que no concibe que el islamismo radical la haya emprendido con España después de que José María Aznar acudiese a las Azores diciendo que estaban allí reunidos los grandes de este mundo para instaurar la democracia y los derechos humanos en Oriente Medio, ha conseguido que la palabra “terrorismo islamista” no se pronunciase en la sesión parlamentaria en memoria de las víctimas del 11-M. Como siguen diciendo que ha sido ETA la culpable, han desdibujado la fecha del aniversario para abarcar todos los actos terroristas, independientemente de la fecha en que se cometieron. Así es que propongo que en el centenario de la Teoría de la Relatividad, no se mencione a Einstein y se diga, en términos generales, “a todos los científicos que han sido”. Así quedarán satisfechos Ángel Acebes y Zaplana y no digamos José María Aznar.

Los esfuerzos del PP por negar la evidencia, de que la decisión de Aznar de formar parte de quienes declarasen la guerra a Sadam Huseín iba a acarrearnos represalias, raya en lo infantil. Se niegan a suscribir un documento consensuado con todos los partidos políticos porque consideran que reforzar los medios para luchar contra el radicalismo de Al Qaeda es reconocer que no fue ETA la responsable de la matanza de Atocha. Hay que seguir investigando. Fue Brutus el responsable material de la muerte de Julio César pero ¿Quién fue el verdadero autor intelectual? ¿Por qué se detuvo la investigación en el primer eslabón de la conspiración? ¿Y Lee Oswald? ¿Por qué se contentó todo el mundo con los resultados de la Comisión Warren?

El PP no quiere distinguir entre la investigación que lleva a cabo el juez del Olmo con la fiscal Olga Sánchez, que no han encontrado la menor prueba de que exista una conexión entre los etarras y los yihadistas, y las recomendaciones de la Comisión Parlamentaria. Sobre la relación ETA y yihadistas, Jorge Dezcallar, Jefe del Centro de Inteligencia Nacional (CNI), ex embajador en Marruecos y nombrado por el propio Aznar como cabeza de nuestros servicios secretos, dice lo mismo que la investigación policial y judicial. No solo no se escucho sus voces de alerta anteriores al 11-M sino que se excluyó al CNI de la investigación del atentado para solo escuchar lo que decían la CIA americana y el MI6 británico, como si todo el mundo supiese más del mundo árabe o musulmán que nosotros o los franceses. De todos modos, el documento de la Comisión Parlamentaria del 11-M no tiene nada que ver con la investigación de la Justicia española. Es solo un documento que analiza los fallos habidos para aportar remedio y evitar nuevos atentados del radicalismo islámico. Una cosa es quienes son los responsables últimos y otra como se podía haber evitado el atentado de hace un año. Cuando el PP sostiene que no hay relación alguna entre el atentado y nuestra participación en la Coalición, habría que preguntarse por qué Francia y Alemania, que no participaron en la pantomima de las Azores, no han sufrido el zarpazo de Al Qaeda? Algunos dirán que tampoco el Reino Unido ha sufrido un atentado parecido. Hay que explicarles que Londres tomó todas las precauciones necesarias antes de embarcarse en la aventura de Irak mientras nosotros seguíamos teniendo serias carencias en materia de terrorismo islámico. Baste decir que teníamos más traductores de euskera que de árabe en nuestras fuerzas de policía.

Nuestras relaciones con Marruecos no eran las mejores cuando más nos hubiese servido la ayuda de especialistas en el salafismo marroquí. Habíamos tenido en manos de la policía personas con antecedentes que luego resultaron ser cómplices necesarios del atentado e incluso ejecutores directos del mismo.

La imprevisión, ante las consecuencias de nuestro alineamiento con los EE.UU., fue notoria por parte del gobierno de Aznar. Todo se fió a un aliado que solo buscaba la revancha por el 11-S en lugar de buscar las causas de la animadversión del mundo islámico hacia ellos. Se fue pasando de la tajante acusación de tener armas de destrucción masiva –los señores Zaplana y Acebes deberían solicitar que se siga investigando donde están esas armas terroríficas, hasta el fin de los siglos—a considerar que Sadam Huseín era una tirano execrable (como si fuese el único) y debería ser eliminado para llevar al pueblo iraquí a la democracia de Jefferson y Abraham Lincoln. Y en esa cruzada, contra el 90 por ciento de la opinión española, nos metió el señor Aznar, el que nos dijo en televisión créanme que les estoy diciendo la verdad. Existen armas de destrucción masiva

El comportamiento del pueblo de Madrid en particular, y del español en general, el no tocar los derechos civiles para luchar contra el terrorismo, considerar que los ejércitos no sirven para combatir el terrorismo, cualquiera que este sea, el que no hubiese brotes de xenofobia, son las lecciones que España ha dado al resto del mundo. Y los políticos, especialmente algunos empecinados de la derecha, no están dando la talla ante sus conciudadanos. Luego se extrañan que en las elecciones se les castigue. Aznar no escuchó a ese pueblo, ni siquiera a nuestros servicios policiales y de inteligencia. La voz de Bush y Blair eran las del mismo Dios. Y lo ha pagado. Ahora, sus sucesores deberían dejarse de discusiones semánticas y corregir los errores que cometieron. //

6 comentarios

Nesemu -

Ni poner los medios para conseguirlo, o robarlo o gritarlo a los cuatro vientos. Es preferible emplear la vida enuna causa digna que vivir de rodillas como esclavos.
Nesemu

Sergio -

Cristóbal, lo que les pasa a la mayoría de los políticos es que no entienden de política. Gobernar es elegir. Pero no elegir por tu bien, sino por el de los ciudadanos, por la 'res pública'. Puede que sea falta de formación, desinterés o falta de costumbre.

Ese mal de la democracia -junto al de la corrupción- es terriblemente grave. ¿Cómo erradicarlo? Con el tiempo, con nuevas generaciones de ciudadanos que entiendan la democracia. En fin, es complicado pero nada nos impide imaginar un mundo mejor.

paula -

Nos hemos reunido todos en torno a las víctimas para homenajear a los desaparecidos, a los que se fueron y los que todavía están entre nosotros, porque una experiencia así, de la que las víctimas no extraen enseñanza alguna, mata a una persona por dentro.
Hemos creado un circo monstruoso en el que los políticos que contribuyeron a la catástrofe, cegados por su ambición y su desmedido afán de "ser una potencia mundial", revuelven la basura, meten el dedo en la herida, y niegan su culpabilidad, niegan su imprevisión, niegan incluso el más mínimo fallo en su gestión. Y, de esta forma, arrastran a los demás políticos a su juego, y machacan a los que quieren olvidar. Una matanza indiscriminada no debe tener aniversario. Ni homenaje. Debe hacernos reflexionar:¿qué pasa con nosotros?¿Hay alguna otra especie en la que se maten entre sí indiscriminadamente? El mundo está muy enfermo, y nosotros debemos, en primer lugar, enseñar a los humanos la gravedad de su estado,la verdad, y en segundo lugar, contribuír personalmente a intentar mejorarlo con cada una de nuestras acciones diarias.
Un minuto de silencio por las víctimas del 11-M. Otro por los miserables que no son capaces de ver el dolor ajeno. Y otro por nosotros mismos, que hablamos demasiado y hacemos muy poco.

Cristóbal -

Viniendo a casa acabo de encontrarme una manifestación de inmigrantes (africanos casi todos) pidiendo a gritos papeles para todos. Qué tristeza me ha dado verlos gritar. La ilusión del momento les hacía parecer alegres. Gente vestida de segunda mano, sin dientes algunos, con pancartas en papel reciclado en los contenedores... Un paisaje que me ha dejado desolado. Veía a sus familias con la ilusión, en Nigeria, en Ghana, en Senegal, en Marruecos, con la ilusión de tener un pariente en Europa. Me gustaría (es un decir, emplear el verbo gustar) pinchar y escuchar las conversaciones entre ellos en los locutorios de Lavapiés. Ahí nos daríamos cuenta de que son humanos y que sus categorías ante la vida son las mismas que las nuestras. No tiene mucho que ver con lo anterior. O si. Pero quería contarlo porque me ha producido una fiebre y una desolación...

Cristóbal -

Todos lo dijimos en cada una de las manifestaciones. Si pasa algo en España, Aznar y los suyos tendrán que rendir cuentas. Y lo sabían, los primeros, los de su partido. Algunos con rabia porque les pareció un caudillismo aznarista disfrazado de internacionalismo.
Zapatero tampoco fue ejemplo sino de ambiguedad. Pero supo ponerse del lado de la mayoría. Y dijo cosas que no se creía, pero que está cumpliendo.
Tenemos cuatro años para reconciliarnos. Para ayudarle a este gobierno a que nos situe en Europa y en el mundo con un papel real y no con ínfulas de grandeza. Y también cuidado con machachar a la oposición, de izquierdas o de derechas, hasta el punto de no dejar alternativa. Necesitamos un PP y necesitamos una IU, mal que le pese a alguien. Y aún necesitamos abrir más el pobre y oligárquico espectro. Afortunadamente, el pueblo de Madrid y el pueblo de España sigue ahí, y a mí me sorprendió infinitamente que las mismas mayorías que ven Crónicas y el Tomate, reaccionaran como lo hicieron el 11-M.

noelia -

Se ha cumplido un año desde la barbarie, y todavía me preguntó como pudo pasar, por qué nosotros. Aunque en el fondo todos sabíamos que ese día iba a llegar, estabamos avisados,pero algunas personas ignorantes no quisieron escuchar. Ahora los políticos todavía siguen discutiendo y jugando con las víctimas, cuando se callaran. Se preguntan por que perdieron las elecciones, yo se lo voy a decir, por no saber escuchar a su pueblo, por no darles voz ni voto cuando se lo pidieron, ahora que no se lamenten por las consecuencias que ellos provocaron. Que asuman sus errores d una vez y admitan que a esto nos llevó la guerra de Irak.